sábado, 25 de agosto de 2012

silencio

Por lo pronto, me he vaciado de publicar, no de escribir. Si a alguien le molesta, lo siento.

martes, 31 de julio de 2012

+6

Avui és un dia una mica especial. Avui mateix, sis anys enrere, vaig tenir la “genial ocurrència” d’obrir aquest petit racó. Ni molt menys començava la meva maldestra aventura literària en aquell moment, però sí que la vaig fer diferent. Durant sis anys i de manera molt més interrompuda del que m’hagués agradat he anat recorrent un camí de contes de prínceps i princeses, d’històries de llàgrimes i somriures i sobretot de molt sentiment delirant. El temps es un mentider ja que, tot i sabent que han passat tots aquests anys, encara em vol fer creure que va ser ahir quan encara era aquell noi de cabells de punxa, que escrivia en aquesta bonica llengua més sovint i tenia masses ocells al cap, si més no, ocells diferents. Tot era més fàcil llavors. Així que això no és més que un petit i auster homenatge a aquell nano de setze anys, a totes aquelles noies convertides ja avui en precioses dones, a tothom qui em va fer sentir algun cop, a tota aquella gent que va perdre uns minuts de la seva vida per llegir-me, i sobretot al aquella persona en la que m'he acabat convertint. 


viernes, 27 de julio de 2012

buenosDÍAS

En medio de un subidón de veneno andaba yo pensando a solas cuando amanecía. De pronto me vi precipitado a un torrente desbocado de recuerdos y memorias, tanto antiguas como recientes y me perdí durante horas. Cuando pasa eso siento al principio la más agradable calidez, pero pronto un frío hueco me abraza y me estremece. Y realmente no sé como me siento, o como se supone que debería sentirme. Es un momento que se hace cada vez más extraño; pero siempre me pregunto lo mismo: ¿Qué hice yo? Y de pronto siento como otro día se pierde.

martes, 24 de julio de 2012

miradas


Se suele decir que los ojos son el espejo del alma y que si sabes ver a través de ellos es entonces cuando puedes conocer realmente a una persona. Hay miradas de todo tipo y aunque muchas pueden parecer iguales todas son distintas y propias de cada persona. Es así como cada uno tenemos nuestros ojos y mirada y por eso gusto normalmente de escudriñar en los ojos de la gente. Y no es fácil porqué hay miradas y miradas. Hay gente que tiene ojos planos como sus encefalogramas o miradas vacías que no dicen nada porque no tienen nada que decir. Tal vez sea yo que no sé ver, pero los aborrezco. También hay gente con mirada, como yo la llamo, normal que hacen relativamente fácil entender cómo se sienten, pero las que realmente me apasionan son esas miradas perdidas, los ojos profundos e insondables y, por supuesto, las miradas seductoras. Me fascina caer prendido bajo esas miradas que son a la par intrigantes y divertidas, tan dulces como aterradoras.
A veces en mis sueños recuerdo a la gente y sus miradas y soy capaz de ver a través de sus ojos, que de vez en cuando me desvelan lo que algún día quise saber. Y a otra noche allí estabas tú; no sé cómo te las arreglaste para aparecer tan de repente y pensé al momento que tal vez si hubiéramos aprendido ese truco la historia ahora mismo sería distinta. Sea  como fuere, allí estabas tú. Tan delicada como fiera, pero eso sólo es un recuerdo de hace mucho tiempo, de quién yo solía conocer. Sentí tu presencia al instante, embriagándome por completo pero no pude mirarte. No quería mirar tus ojos y que me contaran lo que la verdad había hecho. Hablaste con los leves ecos que aún retumban en mi cabeza, callaste y volviste a hablar sin que yo te dijera nada. Dijiste que te mirara a los ojos y me contaste ese tipo de cosas que nunca sabes muy bien si quieres o no saber. Me entró tanto miedo que corrí tan rápido como pude. Corrí… corrí hasta que mis músculos ardían y mis venas bombeaban ácido de batería; corrí hasta que me desperté.

Desde aquella cama que no era la mía, en una habitación que tampoco era la mía podía ver a través de la ventana como ese bucólico cielo norteño plagado de estrellas empezaba a amanecer. Me incorporé angustiado pero sin saber que ese nuevo día me traía la promesa de una nueva mirada.

lunes, 23 de julio de 2012

rituales#2

Y a la tenue luz del fuego escribo lo que soñé, mientras otra rosa arde. Es un momento extraño de mi vida...

miércoles, 18 de julio de 2012

A veces


A veces pienso que este verano está siendo tan productivo como caluroso, es decir, más bien poco. A excepción de contados momentos de lucidez, al igual que algunos días de bochornoso calor, lo demás ha sido tan trivial que me asqueo solo de pensarlo. No pasa nada mientras el tiempo pasa y la vida carece de la emoción que trae consigo la novedad y la pasión que alimenta el sentimiento. A veces, en uno de esos interminables días en los que me recluyo en mi palacio interior, cuando ya he leído tanto que mis ojos reclaman descanso y me siento torpe y vulgar para escribir noto que muero lenta y silenciosamente. A veces esos días fumo tanto que acabo viendo a un dios en el verde humo y hablamos con largos silencios sobre las virtudes y los pecados de su creación. A veces creo que yo solo quiero escapar, desconectar y huir de esta orilla del Mediterráneo y esa ciudad que odio tanto como la amo. Tal vez aún no haya entendido que hace mucho que sin saber muy bien como dejé de agarrar las riendas de mi vida y me vi abocado a un mar bravo de odio y esperanza, de tormentas de castigo y promesas falsas, con la esperanza como único sustento. Obviamente me hundí, pues lo que yo creía esperanza no era más que una desdichada ilusión provocada por las drogas o el veneno. Me hundí entre las aguas turbulentas y cuando pasó la tormenta y el mar lo vio oportuno me escupió a la orilla. A veces pienso que ahí fue cuando me fueron devueltas esas riendas que había perdido.

A veces tengo sueños increíbles y hermosos, que no cuento a nadie, sin necesidad de estar dormido porqué cuando me duermo hay veces que te sueño sin querer y me robas otro día de mi vida. A veces pienso que no debería escribir estas cosas que escribo, ni pensar las cosas que pienso. 


martes, 17 de julio de 2012

ayer te vi pasar



Ayer te vi pasar, andabas por la calle de mis sueños
que hace esquina con el sol de la mañana
que me viene a despertar. Ayer te vi pasar,
andabas con aquel vestido verde
y esos ojos de leona que me pierden y ese aroma a madrugá.
Ayer te vi pasar, andabas por la sangre de mis venas,
por la calle que hace esquinas con mis penas
como andan las olas por el mar.
Reina de mis reinos por reinar, si estos ojos no te ven,
no saben si no llorar, esta boca dice amén,
sin saber lo que es orar y este amor que no enamora,
cansadito de morar en la discordia.
Tú con tu oración, tus locuras, tus historias;
yo con mi canción de los amantes que se odian,
cupido y el amor con locura transitoria,
y la vida es un dolor que no se cura con memoria.
Y si yo me moría por vivir entre tus piernas,
por si acaso eso del frio cuando lleguen los inviernos.
De noche y de día malvivía en las tabernas
y borracho de amor baje a buscarte a los infiernos.
En esto Satanás que no esperaba verme aún,
pobrecito Lucifer sin camitas en su hotel.
Tú y yo nada más que este amor en común,
dice: tú y yo nada más que la patria de la piel;
y estos versos de betún... y el universo en un papel.
Ayer te vi pasar y a pesar de no andar sola,
andabas en soledad y otro hombre te besaba
lo que era mío besar cuanto odio destiló.
tan solo por amar, por no saber amar.
Que orgulloso dios sabrá decirme,
si cupido confundió entre el amor y el olvido,
o bebió más de la cuenta.
En mitad de una tormenta quiso jugar a ser dios
con mi corazón como cometa.


Sharif el Increíble

No queda mucha musa dispuesta por estos lares de dios. Con esta canción creo que será suficiente de momento.