martes, 17 de julio de 2007

Esperando mi momento

Son días difíciles, no lo niego. Todo es un tanto complicado, todo es demasiado irritante. Y es que cuando tu alma crece y crece, cuando tu espíritu rebelde se desborda todo parece una ofensiva. Un cuerpo demasiado pequeño para un alma que parece no tener fin; un espíritu encerrado en una jaula tan pequeña…

Sensación de asfixia que intenta debilitarme. Pero no, mi arrogancia me lo impide; el orgullo es demasiado grande. Aprendí a cuidarme solo, a que caminar por un camino de piedras no es para nada fácil; aprendí que nadie vendrá a ayudarme, a que callar era lo más sensato, pues a veces el silencio es el grito más alto.

Pero hoy todo duele o, si más no, todo irrita. Quiero irme, lejos, bien lejos; quiero explotar, destrozar esta maldita jaula y salir volando, rozar el cielo, acariciar el sol, besar las nubes. Quiero, tan solo, un poco de tiempo para mí.

La tinta se desborda como un río en días de lluvia. La tinta siente, la tinta me entiende.

Y finalmente un tipo arrogante que pretende ser simpático siendo un estúpido escupe con descaro y calla. Porque como ya he dicho, a veces el silencio es el grito más alto; y el más doloroso.

Volví a eso de poner helados. Supongo que el aniversario del blog lo merecía...
En fin... la fuente se ha vuelto a abrir. Esperemos que dure... =D
Gracias a todos por pasaros.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

eiiiiiiiii comooo noo lo tuyoo ess supremo eee niñuu!!! alaaa numess psabaa d pseitoo x akii muaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa*
jEnniFere*

~albertt dijo...

muuuuuuuuuuuuuuuy grato comentariooo!

a ver si nos vemos un día de estos, pero que sea prontito... =D

besoss niña!